Una subespecie de tigre que se creía extinta podría seguir en la naturaleza

El análisis genético concuerda con el extinto tigre de Java.

Una subespecie de tigre que se creía extinta podría seguir en la naturaleza
Créditos: Tigre de Java en el Zoológico de Londres,1942. Créditos: F.W. Bond / Rosi, et al. / Springer, 2020. DOI: 10.1007/978-3-030-42335-3_12

Un pelo de tigre descubierto en una plantación en Java Occidental (Indonesia) sugiere la posible existencia del tigre de Java (Panthera tigris sondaica), una subespecie de tigre que se catalogó como extinta en 2008.

Desde el reporte de su desaparición han habido informes anecdóticos sobre avistamientos del animal, incluyendo huellas no identificadas más grandes que las del leopardo Panthera pardus y posible depredación del ganado, pero hasta ahora las pruebas no han sido concluyentes.

Una de esas observaciones ocurrió en una plantación comunitaria en 2019, lo que llevó a un grupo de conservacionistas de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación de Indonesia a examinar el lugar.


Lea también: Los animales temen más a los humanos que a otros depredadores


En el sitio, el equipo encontró un pelo, potencialmente de tigre, en una valla donde aparentemente un animal había saltado entre una carretera de la aldea y una plantación. También descubrieron huellas y marcas de garras, «lo que corrobora la observación», dice el artículo publicado a finales de marzo.

Según el estudio, el análisis genético del pelo no concuerda con las otras subespecies de tigre, por ejemplo las distancias genéticas con los tigres de Sumatra, de Bengala y de Amur, así como del leopardo de Java, es de 3 a 4%; mientras que la distancia genética entre la muestra del espécimen de museo de la subespecie extinta y el pelo es solo 0.3%.

Una subespecie de tigre que se creía extinta podría seguir en la naturaleza
Fig. 2. El único mechón de pelo del presunto tigre de Java recogido en una plantación comunitaria en Sukabumi, Java Occidental. Créditos: Agencia Nacional de Investigación e Innovación de Indonesia.

Además, el análisis filogenético (para ubicarlo en un árbol familiar) lo ubica como perteneciente al grupo del tigre de Java.

«A partir de este análisis exhaustivo del ADN —dicen los científicos—, llegamos a la conclusión de que la muestra de pelo pertenece al tigre de Java y que pertenece al mismo grupo que el espécimen del museo recogido en 1930».

A pesar de esta prueba, más concreta hasta la fecha, de la posible existencia del tigre de Java, será necesario más estudios genéticos y de campo, dicen los autores.

El tigre de Java tenía un hábitat muy extendido en los bosques de tierras bajas, matorrales y jardines comunitarios en los siglos XVIII y XIX en Java, donde era endémico. Sin embargo, fue cazada como plaga y su hábitat se convirtió para usos agrícolas e infraestructuras, lo habría llevado a su extinción.

El último estudio más grande para dar con su paradero se realizó de 1999 a 2000 con 35 cámaras trampa ubicados en un parque nacional en Java Oriental. En dicho estudio no se encontraron tigres, pero se registraron algunas especies de presas y muchos cazadores furtivos.

Esa falta de datos llevó a un dúo de la UICN a declararlo extinto en 2008, pero el nuevo estudio sugiere que aún podrían existir, y que han pasado desapercibidos en un hábitat lleno de cazadores furtivos.


La información es libre, pero investigar en profundidad, analizar datos y escribir en un lenguaje sencillo toma tiempo, apoya a nuestros editores a través de:

Become a patron at Patreon!